Los caldos comerciales, sean en polvo, en pastillas o en bricks, son muy útiles en la cocina, sobre todo si no tenemos tiempo de ponernos a hacer un buen caldo, aunque su composición sea más bien malucha: mucha sal, grasas de mala calidad y una cantidad anecdótica de verduras.
Algunas mezclas de verduras y hierbas liofilizadas (sin nada más, ni sal ni aceites) sí que nos sirven muy bien para hacer caldos, así como verduras deshidratadas para sopas. Si quieres tener siempre caldo casero y no depender de estas opciones, lo mejor es preparar una buena cantidad cuando tengamos un poco de tiempo libre, refrigerar y congelar.
¿Quieres hacer un caldo de verduras sin químicos?
Preparar tus propios caldos bases instantáneos te hace la vida más fácil, más sabrosa y más sana. Le dan a tus platos el aroma y el sabor de las verduras que utilices de forma natural (sin emplear productos químicos, conservantes ni colorantes industriales).
¡Éste es el método ideal! Sólo necesitas unos pocos elementos naturales y un poco de tiempo. El resultado es un caldo intenso y sabroso que puedes utilizar para hacer sopas, guisos, arroces y mucho más. Además, es una forma eficaz de aprovechar las verduras que tengas en casa y evitar que se desperdicien.
Esto es lo que necesitarás:
Ingredientes
- 3 Zanahorias
- 1 Puerro
- 2 Chirivías (apio de campo)
- 2 raíces de Perejil
- 1 Cebolla
- 2 dientes de Ajo
- 1/2 Grelos
- 1/2 Apio y sus hojas
- 1 Cúrcuma
- Un puñado de Perejil
- Aceite de Girasol c/n
- 80 grs. de Sal
Procedimiento
El procedimiento es muy sencillo. Solo tienes que seguir estos pasos:
-Limpia las verduras, quítales la piel y córtalas en trozos pequeños.
-Calienta un poco de aceite de girasol en una sartén grande y cocina las verduras durante unos 8 minutos, removiendo de vez en cuando.
-Pon las verduras cocidas en un robot de cocina y tritúralas hasta formar una pasta cremosa.
-Pon la pasta en un bol grande y añade sal por encima, removiendo hasta que todo se mezcle uniformemente con una espátula o una cuchara.
-Cubre el cuenco con film transparente y guárdalo en el frigorífico durante toda la noche: así se conservará mejor y mejorará su perfil de sabor.
-Cuando vayas a utilizarlo, ¡tu caldo de verduras casero sin productos químicos añadidos estará listo!
-Mezcla una cucharada de la pasta con un litro de agua caliente, y ajusta la cantidad según el sabor y la fuerza que desees. Guarda el caldo sobrante en un recipiente hermético en el frigorífico o en el congelador; se mantendrá fresco durante varios días o semanas.
Es muy sencillo hacer tu propio caldo de verduras casero sin ingredientes artificiales. Es una opción más sana, económica y respetuosa con el medio ambiente que aportará un sabor extra a tus platos. ¡Pruébalo!