Quién iba a imaginar que la cáscara de la cebolla podría traer tantos beneficios para las plantas y el jardín. Algo que siempre después de cocinar iba directo a la basura, ahora puede servirte para alejar todo tipo de insectos y que sea una gran mina de nutrientes para tus plantas.
La cáscara de cebolla puede tener un nuevo uso luego de cumplir con su función principal que es proteger la carne o pulpa de este alimento y es que muchas veces esas capas terminan en la basura al creer que no pueden funcionar de una forma diferente dentro de la cocina o en nuevas tareas como proteger el huerto urbano o seguir dando vida a las plantas del hogar.
Tanto la piel como la cáscara contienen antioxidantes, antimicrobianos, azufre, potasio, fósforo, hierro, zinc, vitaminas, flavonoides, quercetina y otros. Contiene tantos químicos que es por eso que nos hace llorar cada vez que se corta.
Beneficios de la Cáscara de Cebolla en las Plantas
Resulta que las cáscaras de cebolla son un buen fertilizante, agente de control de plagas y cultivos de hortalizas. Además, contiene una serie de micro y macroelementos (vitaminas de los grupos A y B, calcio, hierro, potasio, fósforo y zinc), muy necesarios para el desarrollo de las plantas, y también contiene una sustancia que puede inhibir las colonias de patógenos y microorganismos del suelo.
Según los especialistas, una buena cáscara de cebolla hace frente a las incursiones de insectos como pulgones, trips, ácaros.
Como fertilizante, las pieles de cebolla tienen un efecto positivo en el sistema radicular de las plantas. Acelera la regeneración de las raíces, reduce la probabilidad de procesos inflamatorios y tiene un efecto inmunoestimulante.
Así puedes usar la Cáscara de Cebolla en las Plantas
Con esta guía tendrás el fertilizante perfecto para plantas o cultivos, obteniendo una solución natural, fácil de preparar y muy económica. Esto es lo que necesitas para prepararlo desde casa y aprovechar las capas externas de este ingrediente culinario.
Ingredientes:
- 10 cáscaras de cebolla
- 1 litro de agua
- ¼ de pulpa de aloe vera(opcional)
Procedimiento
En un recipiente con medio litro de agua pon a remojar las cáscaras de cebolla y deja remojando por al menos un día completo y de preferencia, cubierto con una tapa o un paño. Al día siguiente notarás que el agua está de un tono marrón o como café, en ese momento añade un poco de pulpa de aloe vera, si así lo deseas y mezcla.
Cabe mencionar que también puedes suplir el aloe vera por jabón potásico, en caso de que quieras combatir plagas si solo lo quieres como fertilizante, basta con dejar las cáscaras como único ingrediente.
Luego licua y vierte en un atomizador, mezcla con el resto de agua. Rocía por las plantas y aplica el fertilizante de cebolla una o dos veces por semana, durante al menos un mes, tiempo después notarás cómo las raíces de las plantas se fortalecen y comienzan a florecer.
Otros Metodos
1- Recolecta las cáscaras de cebolla: Guarda las cáscaras de cebolla que normalmente desechas cuando cocinas. Puedes almacenarlas en un recipiente o bolsa hasta que tengas la cantidad suficiente para utilizar como abono.
Tritura las cáscaras: Para acelerar el proceso de descomposición y liberación de nutrientes, es recomendable triturar las cáscaras de cebolla. Puedes hacerlo utilizando una licuadora, un procesador de alimentos o simplemente cortándolas en trozos pequeños.
Añade las cáscaras de cebolla al compost: Si tienes un compostaje en tu jardín, simplemente agrega las cáscaras de cebolla trituradas al montón de compost. Asegúrate de mezclarlas bien con otros materiales compostables, como restos de comida, hojas secas y ramas pequeñas. Las cáscaras de cebolla aportarán nutrientes y ayudarán a mejorar la calidad del compost.
2- Prepara un té de cáscara de cebolla: También puedes hacer un té de cáscara de cebolla para regar tus plantas. Hierve un puñado de cáscaras de cebolla en agua durante unos minutos, luego deja que la solución se enfríe. Utiliza el agua filtrada para regar tus plantas. El té de cáscara de cebolla aportará nutrientes y puede ayudar a prevenir algunas enfermedades de las plantas.
Recuerda que el uso de cáscaras de cebolla como abono o fertilizante es un proceso gradual y los resultados pueden no ser inmediatos. Es importante tener en cuenta las necesidades específicas de tus plantas y combinar el uso de cáscaras de cebolla con otros métodos de fertilización para obtener mejores resultados.
