La cúrcuma es una planta originaria del sur de Asia, más conocida como especia, en forma de polvo de naranja con sabor a pimienta, que se obtiene del tallo llamado rizoma. Sin embargo, más allá de ser un simple condimento, la cúrcuma es ante todo una planta medicinal.
La cúrcuma es eficaz para limpiar y curar heridas o tratar dolores articulares. Estudios recientes incluso han demostrado que la cúrcuma podría reemplazar varios antidepresivos, anticoagulantes y esteroides.
Además, la cúrcuma es una planta fácil de cultivar en casa. A continuación se detallan los pasos a seguir:
- Tome un rizoma grande que corte en pedazos, conservando los pequeños brotes;
- Llene las macetas con tierra para macetas natural y húmeda, cuyo pH debe variar entre 4,5 y 7,5;
- Plantar los trozos de rizoma a una profundidad de 5 cm en la maceta con los cogollos hacia la superficie;
- Regar el recipiente.
Lo mejor es plantar cúrcuma a partir de febrero. De lo contrario, espere hasta el final de las heladas en abril-mayo. No olvides regar la maceta cada dos días, la cúrcuma es una planta que necesita tierra húmeda.
Los rizomas tardan entre 6 y 10 meses en ser consumibles. También es fácil extraerlos, basta con sacar el rizoma de la tierra y cortar un trozo. Luego vuelve a poner el resto en la maceta, el rizoma volverá a crecer fácilmente en unos meses.