Es la planta más romántica que existe con sus pequeñas campanitas blancas. Dotada de un encanto extraordinario, esta planta se puede cultivar tanto en el jardín como en maceta.
Los lirios son unas de las plantas con flor más apreciadas por los aficionados a la jardinería debido a su elegancia y agradable aroma. Entre sus más de 100 especies se encuentra una asilvestrada: el Convallaria majalis, también conocido como muguet o lirio de los valles.
Esta preciosa planta de exterior hará las delicias de cualquier jardín y, aunque tiene cierta fama de ser difícil de cultivar, lo cierto es que no lo es tanto si sabemos a qué atenernos.
Cómo cuidar el Lirio de los Valles
La floración de esta especie rastrera depende mucho de las temperaturas, pero suele extenderse desde finales de abril hasta primeros de junio. Tras las flores, aparecerán unas pequeñas bayas que se volverán rojas en julio. Y el follaje desaparecerá al poco.
Pero no desesperes, el rizoma de esta planta se mantiene vivo bajo el suelo para permitir que la planta vuelva a crecer a la primavera siguiente.
Si quieres cultivar esta flor, debes saber que necesitas plantarla en un espacio de semisombra, ya que el muguet necesita algo de frescor. Por eso, lo mejor es cultivarlo bajo la copa de los árboles con orientación norte (aunque si lo haces así, debes tener en cuenta que la floración será más tardía).
Las mejores épocas para plantar muguet son primavera y otoño, (sobre todo, en otoño, ya que el muguet necesita frío para crecer mejor).
Y verás cómo el muguet forma un tapiz denso sobre el suelo de forma muy rápida. En este punto, ten en cuenta que esta planta es demasiado invasiva, por lo que puedes eliminar algunos en otoño con una horca plana para levantar con cuidado los rizomas.
También necesita humedad, ya que a esta planta le gusta que el sustrato esté húmedo en todo momento, aunque siempre evitando que la tierra se encharque, ya que entonces sus raíces se pudrirían.
En este sentido, y especialmente en los meses cálidos, los riegos deben ser frecuentes, pero no abundantes: cada 2 días en primavera y verano y cada 5 días en otoño e invierno.
Respecto a los suelos, el muguet necesita suelos ligeros y ricos en humus. El drenaje también es importante para evitar encharcamiento. En los meses de crecimiento deberás abonar tu planta de forma regular cada 15 días, y en otoño, deberás añadir nutrientes al suelo con compost.
Para acabar, deberás mantener la planta limpia de hojas y flores secas o dañadas, podándola a finales del invierno. Así tus plantas crecerán con más energía al año siguiente.
Como has podido ver, el lirio de los valles no es tan difícil de cuidar como parece. Aunque no es una planta especialmente indicada para los principiantes en la jardinería, con tiempo y dedicación podrás disfrutar de ella en tu hogar. ¿A qué esperas?