El queso casero es una delicia que muchos disfrutan, pero a menudo puede parecer un proceso complicado debido al uso tradicional de cuajo, un coagulante enzimático. Sin embargo, ¿sabías que puedes elaborar tu propio queso casero sin necesidad de cuajo?
En este artículo, te presentaremos una receta sencilla y deliciosa para hacer queso casero utilizando ingredientes simples que seguramente tienes en tu cocina. ¡Prepárate para sorprender a tus amigos y familiares con un queso hecho por ti mismo!
¿Cómo preparar queso casero sin cuajo?
Ingredientes:
2 litros de leche de vaca fresca y entera
1/4 de taza de jugo de limón fresco
1 cucharadita de sal (opcional, para sazonar al gusto)
Paso 1: Preparación de la leche
Comienza vertiendo los 2 litros de leche de vaca en una olla grande y ponla a calentar a fuego medio. Asegúrate de que la leche no hierva, solo necesitas calentarla lo suficiente para que alcance una temperatura de alrededor de 85°C.
Paso 2: Agregar el jugo de limón
Una vez que la leche haya alcanzado la temperatura adecuada, retírala del fuego y vierte lentamente el jugo de limón fresco sobre la leche caliente. Remueve suavemente para asegurarte de que el jugo de limón se mezcle de manera uniforme con la leche.
Paso 3: Dejar reposar y coagular
Después de agregar el jugo de limón, deja reposar la mezcla durante aproximadamente 10 minutos. Durante este tiempo, la leche comenzará a coagular y formará pequeños grumos de cuajada.
Paso 4: Cortar la cuajada
Usa un cuchillo afilado para cortar la cuajada en pequeños cubos. Esto ayudará a liberar el suero y separarlo de la cuajada. Realiza cortes horizontales y verticales en la cuajada hasta obtener cubos de aproximadamente 1 cm de tamaño.
Paso 5: Calentar la cuajada
Vuelve a colocar la olla en el fuego a temperatura baja y calienta la cuajada durante unos 10 minutos más. Esto ayudará a que los cubos de cuajada se endurezcan y se separen aún más del suero.
Paso 6: Colar y moldear
Coloca una gasa o un paño de algodón limpio sobre un colador y coloca el colador sobre un recipiente grande para recoger el suero. Vierte la mezcla de cuajada y suero en el colador y deja que se escurra durante aproximadamente una hora. Si deseas un queso más firme, puedes colocar un peso ligero sobre la cuajada mientras se drena.
Paso 7: Condimentar y disfrutar
Una vez que la cuajada se haya drenado y haya adquirido una consistencia más firme, puedes añadir sal al gusto y mezclar suavemente para distribuirla de manera uniforme. Luego, moldea la cuajada en la forma deseada: puedes hacer bolas, bloques o incluso utilizar moldes de queso. Si deseas agregar sal o especias, coloca el queso fresco en un recipiente, sazona y revuelve.
Paso 8: Refrigerar y madurar
Coloca el queso en el refrigerador durante al menos 2 horas para que se enfríe y adquiera más firmeza. Después, podrás disfrutar de tu queso casero sin cuajo. Ten en cuenta que este queso no tendrá la misma textura y sabor que los quesos comerciales, pero seguramente te sorprenderá con su frescura y su sabor único.
Conclusión:
Elaborar queso casero sin cuajo puede parecer un desafío, pero con esta receta simple y con ingredientes básicos, puedes disfrutar de la satisfacción de hacer tu propio queso en casa. Experimenta con diferentes condimentos y sabores para crear variedades únicas. ¡No dudes en compartir tu queso casero con tus seres queridos y sorprenderlos con tus habilidades culinarias!
Tip: no tires el suero que obtienes al escurrir el queso, además de nutritivo, es muy útil para marinar carnes o preparar pasteles y galletas, aunque en especial es excelente para masas que requieren fermentación.
¿Qué es el cuajo?
El cuajo, un ingrediente clave en la elaboración del queso, es una enzima que se encuentra, principalmente, en la mucosa del estómago de los mamíferos en el periodo de lactancia y sirve para coagular o cuajar la caseína, proteína de la leche.
Sin embargo, como explica Larousse Cocina, también puede encontrarse en forma de polvo o pastilla.
Ya que su función principal es cuajar la leche, este puede sustituirse por ácidos, como el ácido cítrico o acético, presentes en el limón y el vinagre, respectivamente, por lo que algunas recetas incorporan estos ingredientes cuando no se tiene cuajo.
Ahora sí, ya que sabes cómo hacer queso casero sin cuajo, disfruta un quesito fresco y 100 por ciento leche de vaca, sin ingredientes complicados.