Mantener los muebles limpios con el único uso de agua no sólo no es la forma correcta de tratar el material, sino que además tiene consecuencias a largo plazo. De hecho, después de un tiempo, seguramente experimentarás cambios negativos: la claridad original se verá comprometida y todo te parecerá más opaco.
El problema también se refiere a la formación de grietas tras el uso de agua. Humedad, agua, termitas, todos elementos que dañan nuestros queridos muebles. Quizás te preguntes cómo cuidar las superficies de madera: a continuación te ilustramos una técnica fiable y consolidada.
Pulir muebles de madera con este producto
A la hora de abordar la limpieza de muebles de madera también hay que pensar en su protección de factores ambientales como la humedad. Existen remedios muy efectivos que puedes crear tú mismo en casa, sin tener que recurrir a la compra de productos comerciales mayoritariamente agresivos y tóxicos. El remedio casero que te proponemos consiste en el uso de dos ingredientes fácilmente disponibles: cera de abejas y aguarrás.
La cera de abejas es una cera natural, producida por las abejas y se puede utilizar de decenas de formas diferentes. A través de este producto se crean velas, cosméticos, medicinas y muchos otros productos. Una de sus características más conocidas es la de abrillantador para muebles y materiales de todo tipo.
Es sumamente aconsejable para la madera, su uso tiende a devolverle el brillo. El aguarrás, en cambio, es un disolvente famoso que se utiliza principalmente para limpiar los pinceles, para diluir las pinturas y darles más brillo.
Para pulir nuestros muebles de madera tendremos que combinar estos dos ingredientes:
El primer paso es derretir la cera de abejas al baño María, mezclando con cuidado. 50ml de producto serán suficientes. Cuando se haya disuelto por completo pasaremos al segundo paso que consiste en añadir 50ml de aguarrás.
La dosis debe ser de tres o cuatro cucharadas.
Después de mezclar cuidadosamente los dos productos, coloca una pequeña cantidad sobre un paño de microfibra y frota suavemente las superficies de los muebles.
No podrás creer lo que veras: cada superficie volverá a brillar y recuperará su brillo original. Con este pequeño gesto le darás a tu hogar un aspecto elegante y renovado.
