El vinagre es un gran aliado en el hogar: además de ser un gran ingrediente para dar sabor a nuestros platos, también puede ser de gran ayuda en el departamento de limpieza.
El vinagre tiene muchas propiedades y también se puede utilizar en el jardín: también es un producto revolucionario para nuestras plantas y puede ayudarnos a tener plantas más bonitas, sanas y frondosas.
Vinagre en el jardín: un gran aliado para las plantas
El vinagre es un aliado insustituible en nuestros hogares: en la cocina, puede dar un toque extra a nuestros platos; en la colada, es un excelente sustituto del suavizante, pero también es un valioso ayudante en la limpieza ecológica, especialmente contra la cal, pero también con función desengrasante.
No todo el mundo sabe que el vinagre blanco también puede venir al rescate en el jardín, ayudándonos a tener plantas hermosas, sanas y exuberantes. Gracias a sus innumerables propiedades, esta sustancia es esencial para favorecer el desarrollo de muchas variedades de arbustos.
De hecho, el vinagre puede hacer felices a todas esas plantas «acidófilas», como los rododendros, las gardenias o las azaleas, que sólo aprecian un poco de acidez en el suelo. Para ello, basta con mezclar una taza de vinagre blanco en unos tres litros y medio de agua y regar tus plantas favoritas.
Además de aumentar la acidez del suelo, el vinagre también aporta a las plantas hierro, un mineral necesario para su crecimiento: de nuevo, basta con combinar una taza de vinagre de sidra de manzana con cuatro tazas de agua para tener una mezcla nutritiva para nuestras criaturas verdes.
No olvidemos que el vinagre también tiene propiedades antibacterianas y antisépticas: es ideal para deshacerse de los hongos en las plantas. También en este caso, puedes diluir una cucharada de vinagre en dos litros de agua y aplicarlo a las hojas dos veces por semana y después, con cada lluvia, a todas las plantas para que crezcan bien.
Protege las plantas de los hongos.
Parecerá demasiado bueno para ser verdad, pero el vinagre también es muy útil para prevenir la aparición de moho y hongos en las plantas, ya que actúa como antifúngico y genera un ambiente ácido capaz de bloquear la proliferación de hongos.
Luego crea una solución que consta de 1 cucharada de vinagre y 2 litros de agua y luego rocíala sobre las plantas . Alternativamente, puedes aplicar directamente unas gotas de vinagre en un algodón y limpiar las hojas una por una.
Vinagre, otros usos en el jardín
Además de ayudarnos a cuidar nuestras plantas, el vinagre es un valioso ayudante para muchos otros fines en el jardín.
¡Adiós bichos!
Es, por ejemplo, un excelente insecticida natural. Si las hormigas han elegido nuestro jardín para construir su hormiguero, podemos utilizar vinagre para ahuyentarlas. Basta con verter el producto alrededor del hormiguero: al cabo de unos días, se marcharán solas debido al fuerte olor de la sustancia. También es un remedio totalmente natural contra las babosas, que a menudo infestan nuestros jardines y no toleran su presencia.
El vinagre también es perfecto como herbicida:
Puede ser realmente útil para eliminar pequeñas malas hierbas, como las que crecen entre las grietas de las baldosas.
Larga vida a las flores cortadas
¿Cuántas veces has visto tus flores cortadas colocadas en el jarrón y marchitarse poco después? Supongo que a menudo! Te sorprenderá saber que incluso en este caso el vinagre puede venir a tu rescate, ya que resulta muy útil para alargar la vida de las flores en el jarrón y no hacer que se marchiten rápidamente.
En un litro de agua, por lo tanto, agregue 2 cucharadas de vinagre y 1 cucharadita de azúcar , luego de lo cual, vierta la mezcla directamente en el florero. Y voilà: ¡notarás que tus flores estarán más frescas por más tiempo!
Pero eso no es todo: es ideal para eliminar las manchas de óxido de sus herramientas de jardín.
Lo mejor es rociarlas o sumergirlas en un recipiente con vinagre sin diluir y dejarlas en remojo unos minutos. Una vez retirados, basta con cepillarlos y volverán a estar como nuevos.
Por último, el vinagre es un excelente aliado para limpiar las macetas de terracota: sumérgelas durante unos 30 minutos en una solución de agua y vinagre (tres partes de agua por una de vinagre) y, una vez sacadas, cepíllalas enérgicamente con un cepillo especial.