La rosa del desierto es una de las suculentas que llega a producir flores muy hermosas. Si tienes una de estas plantas, pero todavía no le han salido sus primeros brotes, te damos los mejores consejos para que florezca muy pronto.
¿Qué cuidados necesita la rosa del desierto?
En primer lugar, a esta suculenta le encanta el sol, por lo que necesitarás colocarla en un lugar muy luminoso, de preferencia, en el exterior. Si es complicado tenerla en un lugar fuera de casa, lo mejor es colocarla en una ventana donde haya suficiente luz solar y que también sea de temperatura cálida. La luz es muy importante para esta planta, pues es el principal factor que estimula la floración.
Riego de la rosa del desierto
Como ocurre a una gran cantidad de plantas crasas, la rosa del desierto es especialmente sensible al exceso de humedad, que es el factor más peligroso. Riega siempre sin mojar la planta ni sus flores, sobre todo cuando les da el sol, y no lo hagas hasta que el sustrato esté casi seco del todo. Para acertar con el riego, ten en cuenta que, normalmente, será suficiente con un riego cada 10 o 15 días en los meses cálidos, y de una vez al mes en los fríos.
Tierra y sustrato
Lo más importante con la tierra o sustrato de esta planta es que proporcione un drenaje tan efectivo como sea posible. Para esto, lo mejor es mezclar turba con arena de río u otros materiales porosos que contribuyen a este efecto, como la fibra de coco. No es necesario que sea un suelo muy rico en nutrientes, pero si el drenaje no es suficiente, la rosa del desierto sufrirá. Si plantas tu rosa del desierto en una maceta, asegúrate de que cuenta con agujeros de drenaje.
¿Cómo hacer florecer la rosa del desierto?
La forma más fácil para hacer florecer la rosa del desierto es darle los cuidados apropiados, sin embargo, esta es una suculenta que crece más rápido y se desarrolla mejor cuando tiene suficiente iluminación. Es por eso que te recomendamos colocar tu rosa del desierto en un lugar luminoso e incluso en el sol directo, pues esto promoverá su floración fácilmente.
Así es que, si tienes una rosa del desierto en casa y florece, tienes que estar sumamente feliz, ya que significa que tu hogar se llenará de abundancia y prosperidad, según el Feng Shui.
Abono para la rosa del desierto
En los meses más cálidos, la planta agradecerá un aporte extra de nutrientes en su sustrato para desarrollarse bien y llegar a florecer. Para ello, usa siempre abono específico para plantas suculentas o crasas, y aplícalo siguiendo las instrucciones concretas del envase, no más de dos o tres veces en verano. Si abusas del abono, la planta puede sufrir exceso de alguno nutrientes que conlleven una enfermedad.
Poda de la rosa del desierto
Se puede podar la rosa del desierto para darle la forma que más nos guste, como hacen los que aplican en él la técnica del bonsái. Sin embargo, es bueno fertilizar adecuadamente antes de cada poda para que la planta esté fuerte, y resulta básico hacer los cortes de forma que no se acumule agua en ellas. Aplicar en los cortes canela en polvo ayudará a que cierren antes y sin infecciones por hongos.
Hay que tener cuidado al utilizar la poda como estimulante de la floración, pues no debe usarse a menos que sea muy necesario, ya que este tipo de poda en concreto resulta muy agresiva para la planta.